El paquete de leyes enviado por el presidente al Congreso hoy modifica la forma en la que se distribuyen los recursos entre las universidades nacionales. Reemplaza el artículo 58° de Sostenimiento y régimen económico financiero, estableciendo que los fondos se asignarán proporcionalmente a la cantidad de estudiantes matriculados. Beneficia a las universidades de ciudades grandes en detrimento de las ubicadas en el interior profundo.
El sistema educativo no quedó afuera de las reformas que pretende introducir el presidente Javier Milei y que están incluidas en el paquete de leyes que envió al Congreso esta tarde. Entre otros aspectos que cambiarían de aprobarse el proyecto de ley, el más relevante para la educación superior pasa por un cambio en la manera en la que se distribuyen los recursos que el Estado nacional reparte entre las universidades.
El proyecto de Milei propone que los fondos se distribuyan primordialmente de acuerdo con la demanda que tenga, es decir a la cantidad de estudiantes. Ese criterio favorece a las universidades ubicadas en las ciudades más pobladas, como Buenos Aires y Gran Buenos Aires, Córdoba o Rosario, en detrimento de las que están localizadas en ciudades más pequeñas, como las de Misiones.
“El aporte del Estado nacional para las instituciones de educación superior universitaria de gestión estatal se distribuirá en función del número de estudiantes matriculados en cada institución, el tipo de carrera ofrecida, tales como carreras de grado, posgrado y otras, y su área de formación y también el número de egresados y otros criterios que se definan. Los montos correspondientes para cada institución serán determinados anualmente en el presupuesto anual general de la administración pública nacional, y su distribución se realizará de forma pública y transparente”, señala el proyecto.
Fuente: Misiones Online